Toda la historia de la humanidad ha sido una lucha entre la sabiduría y la estupidez. Los ángeles rebeldes, los seguidores de la sabiduría, han tratado siempre de abrir las mentes; la Autoridad y sus iglesias han tratado siempre de mantenerlas cerradas. Y durante la mayoría de ese tiempo, la sabiduría ha tenido que trabajar en secreto, susurrando su palabra, moviéndose como un espía a través de los lugares humildes del mundo, mientras que las cortes y los palacios son ocupados por sus enemigos.

miércoles, 14 de noviembre de 2012

Malestar frente al gobierno argentino

Señor director:

En un editorial publicado ayer, se hace un llamado a que la administración de Cristina Fernández se abra a introducir cambios a fin de evitar la agudización del tono de las protestas.

Causa curiosidad que un llamado de semejante índole no se haya escrito ni una sola vez durante el año pasado, cuando en Chile había una situación, por lejos, de más efervescencia social. Por el contrario, todos los editoriales apuntaban a que el gobierno no cediera y se mantuviera el statu quo, mediante reformas que profundizaran el modelo.

http://www.latercera.com/noticia/opinion/correos-de-los-lectores/2012/11/896-493126-9-malestar-frente-al-gobierno-argentino.shtml

domingo, 1 de abril de 2012

El Matrimonio del Cielo y el Infierno (William Blake)

La voz del diablo (Fragmento)

Quienes reprimen su deseo son aquellos cuyo deseo es bastante débil para poder ser reprimido.
De este modo, el elemento restrictor o Razón usurpa el lugar del deseo y gobierna al abúlico.
Y una vez reprimido, se vuelve gradualmente pasivo hasta no ser sino la sombra del deseo.

La historia de esto se halla escrita en el "Paraíso Perdido", y el Dominador o Razón se llama Mesías.
Y al primitivo Arcángel, capitán de la armada celeste, se le llama Demonio o Satán, y sus hijos son llamados Pecado y Muerte.
Mas en el libro de Job, el Mesías de Miltoon se llama Satán.
Porque esta historia ha sido adpotada por ambos partidos.
A la Razón le parece que el Deseo ha sido expulsado, pero el Demonio calcula que el Mesías cayó y construyó un cielo con lo que le robó al Abismo.
Así está revelado en el Evangelio donde lo vemos rogar al Padre que le envíe el Consolador o Deseo, a fin de que la Razón tenga ideas para con ellas construir. -El Jehová de la Biblia no es sino aquel que viven entre llamas.
Sabe que, después de su muerte, Cristo se convirtió en Jehová.
Pero en Milton el Padre es Destino, el Hijo es la Razón de los cinco sentidos, y el Espíritu Santo es la Nada.

NOTA.-Milton escribió prisioner cuando habló de los Ángeles y de Dios, y en libertad cuando habló del Infierno y los Demonios, porque fue un verdadero poeta y, sin saberlo, del partido de los Demonios.

jueves, 16 de febrero de 2012

Proverbios del Infierno


En tiempos de siembra aprende, en tiempos de cosecha enseña y en el invierno goza.

Conduce tu carro y tu arado sobre los huesos de los muertos.

La senda del exceso lleva al palacio de la sabiduría.

La prudencia es una fea y rica solterona cortejada por la incapacidad.

Quien desea y no actúa engendra la plaga.

El gusano perdona al arado que lo corta.

Sumergid en el río a quien ama el agua.

El necio no ve el mismo árbol que ve el sabio.

Aquel cuyo rostro no irradia luz nunca será estrella.

La eternidad está enamorada de las creaciones del tiempo.

A la atareada abeja no le queda tiempo para la pena.

Las horas de la locura las mide el reloj, pero ningún reloj puede medir las horas de la sabiduría.

Ningún alimento sano se atrapa con red ni trampa.

En años de escasez, usa número, peso y medida.

No hay pájaro que vuele demasiado alto si lo hace con sus propias alas.

Un cuerpo muerto no venga injurias.

El acto más sublime consiste en poner a otro delante de ti.

Si el necio persistiera en sus necedades llegaría a sabio.

La necedad es el atuendo de la bellaquería, la vergüenza es el atuendo del orgullo.

Las prisiones se construyen con piedras de Ley; los burdeles con ladrillos de religión.

La altivez del pavo real es la gloria de Dios.

La lujuria del chivo es la liberalidad de Dios.

La ira del león es la sabiduría de Dios.

La desnudez de la mujer es obra de Dios.

El exceso de pena ríe; el exceso de dicha llora.

El rugir de los leones, el aullido de los lobos, el oleaje furioso del mar huracanado y la espada destructora, son porciones de la eternidad demasiado grandes para que las aprecie el ojo humano.

El zorro condena a la trampa, no a sí mismo.

El júbilo impregna; las penas engendran.

Dejad que el hombre vista la melena del león y la mujer el vellón de la oveja.

El ave un nido, la araña una tela, el hombre la amistad.

El egoísta y sonriente necio y el necio que frunce malhumorado el ceño han de considerarse sabios, y podrían ser medidos con la misma vara.

Lo que hoy está probado, en su momento era sólo algo imaginado.

La rata, el ratón, el zorro y el conejo vigilan las raíces; el león, el tigre, el caballo y el elefante vigilan los frutos.

La cisterna contiene; el manantial rebosa.

Un pensamiento llena la inmensidad.

Si estás siempre listo a expresar tu opinión, el vil te evitará.

Todo lo que es creíble, es una imagen de la verdad.

Nunca el águila malgastó tanto su tiempo como cuando se propuso aprender del cuervo.

El zorro se provee a si mismo; pero Dios provee al león.

Piensa por la mañana, actúa a mediodía, come al anochecer y duerme por la noche.

Quien ha sufrido tus imposiciones, te conoce.

Así como el arado sigue a las palabras, Dios recompensa las plegarias.

Los tigres de la ira son más razonables que los caballos de la instrucción.

Del agua estancada espera veneno.

Nunca sabrás lo que es suficiente a menos que sepas lo que es más que suficiente.

¡Escucha los reproches de los tontos! ¡Forman un título real!

Los ojos del fuego, la nariz del aire, la boca del agua, las barbas de la tierra.

El débil en coraje es fuerte en astucia.

El manzano nunca pregunta al haya cómo ha de crecer, tal como el león no interroga al caballo sobre cómo atrapar la presa.

Quien recibe agradecido da copiosas cosechas.

Si otros no hubiesen sido tontos, lo seríamos nosotros.

El alma rebosante de dulce deleite jamás será profanada.

Cuando ves un águila, ves una porción de Genio: ¡Alza la cabeza!

Tal como la oruga elige las hojas mejores para depositar en ellas sus huevos, el sacerdote lanza sus imprecaciones para los más dulces goces.

Crear una florecilla es labor de siglos.

La condena estimula, la bendición relaja.

El mejor vino es el más añejo; la mejor agua, la más nueva.

¡Las plegarias no aran! ¡Los elogios no cosechan!

Las alegrías no ríen. Las tristezas no lloran.

La cabeza lo Sublime; el corazón, lo patético; los genitales, la Belleza; manos y pies la Proporción.

Como el aire al pájaro o el agua al pez, así es el desprecio para el despreciable.

El cuervo quisiera que todo fuese negro; el búho, que todo fuese blanco.

La exuberancia es belleza.

Si el león recibiese consejos del zorro, sería astuto.

El perfeccionamiento traza caminos rectos; pero los torcidos y sin perfeccionar son los caminos del Genio.

Mejor matar a un niño en su cuna que alimentar deseos que no se llevan a la práctica.

Donde no está el hombre, la naturaleza es estéril.

La verdad nunca puede decirse de modo que sea comprendida sin ser creída.

¡Suficiente! o demasiado.


William Blake, "El matrimonio del Cielo y el Infierno".